‘España puede presumir de logros en reducción de víctimas en carretera, pero queda pendiente tomar medidas para reducir la velocidad y proteger a colectivos vulnerables.
En seguridad vial, España ocupa el quinto mejor puesto de la Unión Europea, con 39 fallecidos por millón de habitantes. Pero ninguno de los países que están delante (Suecia, Reino Unido, Países Bajos y Dinamarca) cuentan con 80 millones de turistas ni con 5,2 millones de motocicletas, así que probablemente nuestro país sea un referente mundial. El problema es que no lo sabemos ni tampoco nos lo creemos; también, que con más de 1.200 fallecidos en las carreteras y más de 500 fallecidos en las ciudades, podemos y debemos mejorar.
Lo primero que procede hacer no es buscar culpables, sino soluciones. Culpar al envejecimiento del parque de vehículos o al aumento de los desplazamientos no nos lleva a ninguna parte. Fijémonos en los datos para intuir posibles vías de respuesta’.
Continúa leyendo el artículo de Pere Navarro, director general de Tráfico entre 2004 y 2012, completo en El País.